14/12/09

Una entrada puchis

...

A veces, entre la aburrición infinita que me provoca la creación de logos, me aventuro a proponer cosas más entretenidas que inexorablemente terminan olvidadas en la carpeta de unapproved drafts. En ese rincón, entre cientos de íconos que esperan ser reciclados, descansan en paz ilustraciones sencillas, personajes peludos, mórbidos monigotes, lenguas inquietantes y demás cursilerías que nacieron sabiéndose extintas. No son más que simples vectores, pero no puedo evitar sentir emociones contenidas cuando pienso en ellos. Porque quizá se salvaron del horrendo final que significaría ser el logotipo de una empresucha gabacha, con cientos o miles de reproducciones en web, publicidad impresa, papelería corporativa y estúpidos promocionales; se salvaron de ser una imagen de ventas junto a un ridículo nombre de empresa y un slogan absurdo; se salvaron de ser LLC, INC, TM ó CO. Se salvaron de ser todo esto, pero también se salvaron de ser cualquier otra cosa, y eso me causa un inmenso pesar. Los imagino tristes, encerrados EnElArchivo25078-D1.ai hasta nuevo aviso, mismo que sé que no llegará. ¡Ah! si sólo fueran swooshes, iniciales, monos cabeza de bola o cualquier otro ícono multifuncional y fome, posiblemente tendrían una oportunidad. Pero no, son auténticos. Y les toca sufrir. Rechazados, olvidados, excluidos, abandonados, marginados.

Pero pensándolo mejor puede ser que me equivoque. Yo soy del mundo y los olvidé en ese rincón, pero tal vez ellos no son así. Y al sonar las tres de la mañana se ponen a bailar y salen de sus carpetas dispuestos a gozar. Creo haberlos escuchado ya alguna vez que me quedé a dormir en la oficina, supongo que habré dejado las bocinas prendidas. Sí, ahora recuerdo: risas, música, ruidos, clics, bing, ¡plank!, suuush. Ha de ser que se divierten, hacen y deshacen. A estas alturas ya se habrán vuelto expertos en usar las herramientas, harán trazos, dibujarán objetos, crearán su propio universo en pantones y degradados profesionales. Un mundo a la medida de sus deseos, donde todo es tan fácil como copipeist, y si no les gusta, controlzeta. Y así todos ellos seguramente serán felices...

Pero una duda me asalta: ¿a qué jugarán los logos?

3 comentarios:

Estrategaz dijo...

Si por ahí, entre los logos abandonados, hay un "Piroscopio" que creas que ya se hartó y que le gustaría ser logo de un proyecto que incluye risas, chingas, música, sueños, peleas, gritos, córrelequeseva, pídeloportransparencia, nomediolaentrevista, yoniqueríaserperiodista... entonces avísame, lo acogeremos como uno de nosotros.

EL RAFA CHAFA dijo...

No, pero tengo un castor de cola de cuadritos

aLeSs! dijo...

no manches we entiendo a la perfeccion tu texto aparte yo tmb tengo por ahi un pez jugador de cartas lastima!!!